Atlas, el relato de amor por el diseño de Pepe Terol y Vicent Martínez

Texto: Cristina Bea

Escuchar a Pepe Terol y a Vicent Martínez hablar de diseño, pasión y creatividad es una redundancia en sí misma, porque ellos, fundador de la empresa textil Equipo DRT y presidente de la Fundación del Diseño de València, respectivamente, encarnan como pocos las emociones en torno a “aquello que mejora la calidad de vida de las personas”. Así define Martínez el diseño, al que añade otros binomios indisolubles como “proceso proyectual”, “función” y “emoción”. Lo hace sentado en el despacho de Terol, en el Polígono Industrial Fuente del Jarro, donde se citan para ultimar su participación en la próxima Feria Hábitat València, en la que comparten proyecto: Atlas, la tela para cortinas que el diseñador ha creado para la firma valenciana.

    “Atlas es un jeroglífico de signos en los que se representa una imaginaria barca que navega buscando horizontes y emociones para los años venideros. Yo soy de los que cree que los objetos tienen relato y la emoción viene del relato”. El diseñador valenciano habla de la tela, realizada en poliester viscosa con una avanzada técnica devoré, pero el paralelismo hace que su definición nos ubique en el año 2016, cuando Vicent Martínez decide marcar un antes y un después en su vida. “Después de una etapa anterior mucho más promiscua, monto un estudio y decido ser sólo diseñador. Me hago una lista de cosas que me gustaría hacer y que no he hecho hasta ahora, y en una de ellas aparece DRT”, recuerda Vicent, tela en mano. Quería diseñar una de ellas como en esa exitosa promiscuidad diseñó su laureada librería Literatura para Punt Mobles, su entonces empresa, la primera compañía valenciana en ganar el Premio Nacional de Diseño, en 1997.

    Y así lo hizo, no sin suspenses varios: “En un encuentro, le comento a Pepe que me gustaría hacer algo (relacionado con el textil) y él me lanza el guante, me dice que prepare algo. Tardé dos años en responder, tardé mucho, y un día ya con vergüenza aparezco con un dossier, todo ilusionado. Pepe muy amablemente me dice que lo que había preparado no le encajaba exactamente. Y en agosto de 2021, en plena pandemia, recibo una llamada y Pepe me dice que va a desarrollar una tipología de cortina con un método innovador, y retomamos la historia.”

    E historia no es un sustantivo con el que Martínez se desembaraza de la explicación, no; historia es lo que plasmó en la tela de autor que creó para Equipo DRT a partir de dibujos de Ana Hernández, doctora en Bellas Artes. “Sus dibujos son como las miradas a las nubes, donde al contemplarlas, vemos pasar todo un mundo reflejado en ellas. Cuida mucho los trazos que, además, no son manuales, sino de botella de pintura, con lo que cual tienen una plasticidad muy bonita y muy evocadora que alimenta aún más el relato”, describe uno de los impulsores de València Capital Mundial del Diseño 2022 sobre un trabajo que nace para personas que valoran la armonía, la naturaleza, lo equilibrado, lo saludable, el soñar o los relatos.

    E innovación es que “siempre los tejidos son dos hilos: horizontal y vertical, trama y urdimbre. En esta tela la innovación es un tercer hilo que le da una mayor carga a la tela y que nos permite hacer la transparencia”, explica Terol sobre esta nueva base de tejido en la que el dibujo se materializa y da forma a este diseño para espacios donde la luz se moldea y tamiza para crear atmósfera.

    Confieso que, ante sus explicaciones, levanto las cejas y sonrío al pensar en lo mucho que se aprende al escuchar a dos personas que hace algún año que alcanzaron los 70. Dos hombres, tan amantes como virtuosos de su profesión, hechos a sí mismos y cuyo bagaje personal y profesional les permite resumir la evolución del diseño –“el diseño lo es todo”, recalca Pepe Terol- de una forma sencilla y didáctica. “Venimos de una escuela, los dos, los que no estábamos en el diseño puro, en la que diseño eran las cosas raras. Antes veías una cosa rara y la gente decía: ‘Esa cosa rara es un diseño’. Pero con el tiempo vas aprendiendo que el diseño un tema práctico, adaptado: una silla donde te sientes más cómodo o una tela que te aporta algo que otra tela en sí no tenía, que no tenía sentido. Es una tela que la quiero para cortina y es un diseño que se hace a propósito para esa cortina. Todo eso se ha ido descubriendo”, detalla el fundador de Equipo DRT, al tiempo que también descubren que los dos coincidieron en Nueva York en 1984 en busca de inspiración y nuevos mercados.

    Esta próxima semana van a volver a compartir lugar -Feria València-, y tiempo –del 20 al 23 de septiembre- con el diseño entre manos. Pepe Terol y Vicent Martínez; Equipo DRT y ‘Vicent Martínez, un presente continuo. La memoria, lo reciente y lo inédito’, el nombre de la muestra honorífica hacia la figura del diseñador valenciano que albergará Hábitat y que contará con hasta tres caídas de trece metros cada una con su Atlas común. “Pepe Cosín ha tenido una idea brillante, que le pareció bien a Pepe, y es colocar esta tela como cubierta de tejido sobre una campana de luz muy potente. El efecto de luz va a ser precioso. Va a ser un universo, un firmamento de luz, de movimiento, de relato”, explica Martínez.

Pepe Terol: Yo a la gente con ideas nunca la freno…

Vicent Martínez: Eso es lo que hay que agradecer porque hay otra historia que está muy clara: sin empresas no hay diseño. El diseño tiene un apellido que se llama industrial. No puede ser de otra manera, al final hay vendedores detrás. Es vital.

Pepe Terol: El diseño es una mejora del entorno.

Vicent Martínez: El diseño crea identidad, y como sociedad el diseño nos puede ayudar a generar identidad: identidad de pertenencia, de un gusto por un entorno, por una manera de vivir nuestro Mediterráneo, nuestro país…

Pepe Terol: Como calidad y transparencia Atlas es muy novedoso, aparte del diseño, que tiene el mensaje. Es la suma de las dos historias.

Vicent Martínez: Y tiene ese punto ancestral... Pepe es un hombre apasionado e implicado por el telar, por el hilo. Es un lujo tener un interlocutor como él. Los buenos diseños no salen de casualidades, sino de las sumas, de esto. Lo mejor que te puedes encontrar en una empresa es alguien apasionado con lo que hace porque mejorará lo que tú lleves, siempre. Hay buenos diseños que acaban siendo malos porque no hay comunión, y hay historias que a lo mejor no llegan a ser tan buenas y se convierten en buenas por esa comunión.

    Extraigo estas líneas de la conversación que generan entre ellos. Hace algunos minutos que he dejado de preguntar. Sólo pienso en cómo ser capaz de, como ellos hacen con el diseño, plasmar en este texto su amor por el diseño, por el textil. “¿Quedamos entonces en que el diseño es relato, es pasión…?”, digo en voz alta. “Sí, es un compendio de muchas cosas”, que se le pasan por el brillo de los ojos a Pepe Terol mientras las resume. “El diseño es función, relato, emoción”, categoriza sonriente Martínez, quien apostilla: “La industria o la técnica hay que añadirla. Sin ella, no hay diseño”.

Ni relato.